
Con mis últimas experiencias empiezo a desear coger una gran olla, ponerla al fuego y luego echar dentro todas las miniaturas que pueda encontrar a mi paso. Valen dinero, así que no lo haré. Gustan a mis jugadores, así que no lo haré… y bueno no son mias… asi que no lo haré…. ¿o si? Miniaturas en tu mesa de rol.
De este tema se ha escrito largo y tendido, y hay muchas listas de pros y contras. Hay grandes posts donde echar un vistazo como el del amigo Rolero (MINIATURAS, ESCENOGRAFÍA Y ROL) o el post sobre el consumismo de minis de FrikiDiario (CONTRA LAS MINIATURAS).
A título personal es algo que me horroriza. Usar miniaturas para representar combates hacen que este deje de ser tan épico y fantasioso. Una de las cosas más llamativas de las sesiones de rol es que cada jugador puede interpretar las palabras del Narrador a su manera. Tal y como le gusta recrear las historias o adecuandolo al género literario o cinematográfico que más le motiva. Pero, cuando se trata de combates, de peleas, de luchas… siempre aparecen los tokens encima de la mesa. Ya sean minis, ya sean dados, ya sean fichas del parchís, da igual lo que haga de protagonistas de la escena, deja de ser abstracto. Deja de ser una ensoñadora descripción de un repentino encontronazo, de un violento suspiro, de una legendaria victoria o un heroico final. Todo ello se convierte en un juego de tablero más, en un imperio cobra con aires de grandeza, con un HeroQuest levantado de la tumba para que los personajes se sientan seguros de que entendemos su plan de ataque.
La velocidad en los combates depende mucho del tipo de juego que estés “masterizando”. Lo lógico es que en partidas realistas los combates sean excesivamente dinámicos, no dando casi tiempo a reaccionar antes de que algún contendiente acabe en suelo tratando de sujetarse las tripas. En partidas de acción pura o ciencia ficción la velocidad de esos combates, respecto a su narración me vengo a referir, es muy importante. La velocidad es la que marca el grado de tensión con narraciones rápidas y donde pasan muchas cosas repentinas para dar dinamismo a las persecuciones… o la velocidad se atenúa para describir ese salto con los pies en paralelo a la cabeza desde el parapeto, con las dos pistolas en las manos soltando plomo a saldo y el vuelo de tres palomas que esparcen plumas por doquier… y luego llegan las miniaturas, el tablero y sobre todo las “casillas” y convertimos la peli de John Woo en un conecta cuatro.

También esta el lado positivo de usarlas, y es que siempre va a concretar mucho más que esta pasando en cada momento del combate. Y lógicamente da mucho color ver un montón de minis bien pintadas encima de la mesa para darse de tortas, pero sigo pensando que para eso estan los Juegos Tácticos o de Estrategia y no para los Juegos de Rol. Pero bueno al fin y al cabo hay sistemas que es casi que obligatorio usar miniaturas, es más están diseñados para ello.
Y vosotros ¿usáis minis con todos los juegos de rol? ¿Se puede rolear en d20, D&D, o Pathfinder sin que se conviertan en juegos de mesa con reglas “muy completas”?
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